Busca apoyo emocional y para la lactancia si lo necesitas. Nosotras te contamos cómo cuidarte físicamente en este periodo tan vulnerable, sobre todo para el periné.
Posparto inmediato: La cuarentena
Es un periodo de vulnerabilidad fisiológica en el que debemos asegurar darle al cuerpo todos los cuidados necesarios para su más pronta recuperación. La pelvis que ha sufrido un "esguince fisiológico" necesita tiempo para recuperarse. Es por ello que la mujer deberá, sobre todo las tres primeras semanas, permanecer tranquila y no hacer esfuerzos físicos, centrando sus energías en su autocuidado y el de su bebé.
Los cuidados en el posparto se pueden clasificar en tres grupos: físicos, nutricionales y emocionales. Otros profesionales sanitarios son expertos en los dos últimos, nosotras vamos a centrarnos en los físicos.
Cuidados físicos:
En cuanto a los cuidados físicos es importante saber:
- Recomendamos una deambulación precoz
pero combinar varias posturas, pasar algún tiempo tumbada y sentada, mejor cambiar de postura y caminar que "estar de plantón".
- Los loquios: son las pérdidas de sangre vaginales (tipo regla) que se mantienen habitualmente tras 2 -4 semanas después el parto. Duran más si es parto ha sido por cesárea que si ha sido un parto vaginal. En las 24 horas posteriores al parto que se pueden controlar con compresas de algodón orgánico transpirable. Nunca se tratarán con tampones o copas menstruales. En caso de fiebre, mal olor del flujo o cantidad - duración del sangrado anormal, se deberá consultar con el ginecólogo o matrona.
No hay que asustarse si se expulsa algún coágulo de sangre pues es normal, aunque sea de gran tamaño, tras unos días deberá ir remitiendo la hemorragia.
- Los entuertos: son las contracciones uterinas que continúan tras el pato y se producen para que el órgano vuelva a su tamaño. Garantizan el cese progresivo de la hemorragia y son dolorosas en algunas mujeres, sobre todo las que han dado a luz más de una vez. La lactancia materna y la succión del bebé en el pecho estimula la liberación oxitocina en la madre y eso puede activar la intensidad de estos entuertos. Por eso en las madres lactantes la duración de los loquios suele ser menor y el útero se contrae antes, mejorando su recuperación. Para controlar el dolor de los mismos, podemos hacer respiraciones abdominales, modificar la posición y realizar relajación mental.
- El dolor perineal:
Tengas o no puntos, es frecuente tener contusionada la vulva y el perineo. Lo más sencillo para manejar estas molestias es aplicar frío local (nunca directo sobre la piel) si existe inflamación en vulva, periné o ano. A veces son las hemorroides
las que dan más problemas a este nivel y también se deberían tratar con frío u pomadas compatibles con la lactancia en el caso de que se opte por ella. También podemos tomar cápsulas de árnica ya que es un antiinflamatorio natural o algún parecetamol.
- Es muy importante evitar el estreñimiento
en el posparto inmediato y no hacer esfuerzos al defecar. Es muy frecuente la sensación de vulnerabilidad en esta zona tras el parto. Se recomienda llevar unas pautas de alimentación especialmente laxantes basadas en frutas y verduras, si es necesario tomar algún laxante o poner algún enema puntual será más conveniente que hacer esfuerzos de pujo que pueden lastimar el perineo o retrasar el momento defecatorio por miedo. Si retrasas en momento de defecar solo conseguirás que las heces sean más duras y el momento sea más doloroso.
. Por otro lado, si existen cicatrices
ya sea de episiotomía o cesárea, puedes notar molestias, dolor y tirantez durante algunos días. Más tarde se puede sentir acorchamiento o sensibilidad en la zona debido a las lesiones que ha ocasionado la herida en las pequeñas terminaciones nerviosas de la zona. En cualquier caso, deberemos desinfectar la zona y mantener la piel limpia y seca todo el día en la medida de lo posible. En las episiotomía o puntos en la vulva cambiar con frecuencia las compresas para que los loquios no humedezcan la herida. En las cesáreas a veces se utilizan parches cicatrizantes que no se retiran, en ese caso no quitarlos y seguir indicaciones médicas. En los demás casos, lavar la zona y secarla bien con secador o con toques de toalla o gasas. Además, recomendamos no utilizar ropa que presione la zona de la cicatriz y realizar un masaje con aceite para evitar que la cicatriz se quede adherida al tejido celular subcutáneo. También se puede aplicar encima de la cicatriz el líquido de una infusión de tomillo una vez enfriado, con una gasa o algodón ya que esta planta tiene propiedades cicatrizantes.
- En cuanto al cuidado de las mamas, si con la lactancia aparecieran grietas o existiera mucho dolor, es importante acudir a una matrona o especialista en lactancia para valorar el correcto agarre del bebé.
- Cuidados de la piel, es muy importante seguir cuidando la piel, al igual que durante el embarazo. Debemos seguir poniendo aceite de almendras o de rosa mosqueta desde pecho a rodillas, insistiendo en caderas y abdomen. Debemos favorecer que se recupere y sobre todo si hubieran estrías y mucha flaccidez. La piel se ha distendido mucho y se queda laxa, como si fuera una camisa 3 tallas grande. Si persiste la piel laxa tras dos meses de haber dado a luz y no se recupera espontáneamente, podríamos aplicar en consulta la diatermia con cremas reafirmantes profesionales podría ayudar tras la cuarentena.
- Cuidados del periné
en esta etapa serán importantísimos, por eso te ofrecemos una serie de recomendaciones:
- Evita largos periodos de pie, mejor paseos cortos y frecuentes y cambiar de postura a lo largo del día.
- Controla tu postura, elonga la columna e imagina que te tiran desde la cabeza con un cable imaginario, ponte recta y evita malas posturas mantenidas, como por ejemplo al dar el pecho o biberón al bebé. Utiliza apoyos en la espalda y en tus muslos con cojines que te ayuden a descargar el peso.
- Evita el estreñimiento a toda costa. Cuida tu alimentación y evita hacer pujos. Si te han dado puntos en el periné, puedes estabilizar la cicatriz con tus dedos en el momento de la salida de las heces para protegerla.
- Cuando tosas o estornudes sujeta tu abdomen con las manos, como cuando estabas embarazada; y activa tu suelo pélvico justo antes del gesto de toser o estornudar.
- Realiza una valoración de fisioterapia de suelo pélvico, abdomen y lumbosacra tras el parto. Si has tenido un parto vaginal, deberás esperar al menos un mes y medio y has dado a luz por cesárea al menos 2 meses.
- No cargues pesos, no corras ni saltes ni hagas esfuerzos físicos de ningún tipo hasta al menos 3 meses
tras el parto.
- Realiza ejercicios de suelo pélvico
suaves lo antes posible preferiblemente supervisados por un profesional.
- Antes de retomar cualquier actividad física o deportiva, deben haber pasado al menos 4 meses
por norma general. La recuperación a nivel muscular se logra a partir de los 4 o a veces 5 meses tras el parto.
- En el caso de haber tenido un parto complicado, puntos o cesárea deberás esperar probablemente aún más tiempo. Te recomendamos una revisión para valorar el estado de recuperación de tu compartimento abdomino-pélvico y para que tu vuelta a la actividad deportiva no sea perjudicial.
Son unos consejos de tus fisios de suelo pélvico de confianza. Un saludo cordial y esperamos que te haya gustado esta entrada.
Rocío y Beatriz.